Las enfermedades o condiciones médicas crónicas suponen un desafío, entre otros actores, para las familias. Cuando se ve comprometido el funcionamiento del paciente, muchas veces resulta necesario el apoyo familiar, adaptándose a las necesidades y dificultades que surgen a medida que progresa la enfermedad.
En un primer momento, suele ser un familiar del paciente quien toma el rol de cuidador. Generalmente, un familiar pasa a dedicar prácticamente todo su tiempo al cuidado; y es a quien llamamos cuidador principal. Usualmente convive con el paciente o pasa la mayor parte del día con él, y es quien brinda el máximo apoyo instrumental y afectivo.
Como hemos mencionado en otras oportunidades, si el cuidador no atiende a sus propias necesidades y su bienestar, este rol puede llevar a un estado de malestar y agotamiento, lo que se conoce como síndrome de sobrecarga del cuidador o burn-out (“estar quemado”).
Tomado de: https://www.infobae.com/tendencias/2023/03/31/sindrome-de-sobrecarga-del-cuidador-4-consejos-para-que-las-tareas-no-generen-agotamiento/Para mayor información haga clic en el siguiente enlace: